miércoles, 27 de enero de 2010

Madame Xanadu (Matt Wagner/Amy Reeder Hadley)

Nunca le había prestado mucha atención al personaje de Madame Xanadu, diseñado por Michael W. Kaluta en 1978 para Doorway to Nightmare, serie antológica de misterio de DC. Tras el nombre de Madame Xanadu se encuentra la ninfa Nimue, la Dama del Lago de las leyendas artúricas, reciclada laboralmente en el Nueva York de finales del siglo XX como una adivina tarotista que con sus superpoderes mágicos ayuda a salir de problemas sobrenaturales a sus clientes. Apareció en algún que otro título antológico DC, e incluso tuvo su propia cabecera en 1981 (que duró sólo un número). Apartir de entonces siguió apareciendo en diferentes tebeos DC, casi siempre en colecciones con temática sobrenatural, como Los Libros de Magia o The Spectre.
 
En 2008 el personaje había adquirido cierta notoriedad por unas macrosagas que no me he leído (¿?), por lo que se decidió darle un lavado de cara. Y es aquí donde entra Matt Wagner, autor de títulos tan memorables como Mage o Grendel. Wagner nos lleva en este primer tomo de Madame Xanadu a un viaje por el espacio y el tiempo que comienza en Camelot en los tiempos del Rey Arturo y termina en Nueva York en los años 30's, pasando por Xanadú en el siglo XI, París en la Revolución Francesa y Londres en tiempos de Jack el Destripador. En todos sus viajes se encuentra con otro personaje inmortal de DC, el Fantasma Errante, con el que tiene una relación de amor-odio, así como con apariciones de Demon, Muerte, Zatara y El Espectro, personajes habituales del Universo DC más paranormal. Hasta ahí, como planteamiento, la cosa pinta más o menos bien, pero el desarrollo que hace Wagner, pese a su buen curriculum, es todo menos interesante: situaciones sin sentido, personajes planos y una protagonista que no acaba de convencer. La historia en sí podría haberse contado con mucho menos papel (son diez números americanos), se alarga innecesariamente para al final no contar nada relevante. Nada que ver con lo que hizo Wagner cuando actualizó The Demon.
 
El dibujo recaé en Amy Reeder Hadley, autora excesivamente influenciada por lo más ñoño del manga japonés. En Madame Xanadu hace un esfuerzo por adaptar el estilo de los antiguos cómics de Kaluta al amerimanga, que puede gustar más o menos, pero el resultado es narrativamente fallido por hacer la lectura más torpe y farragosa, llegando a ser confusa en algunas partes.

2 comentarios:

Von Kutren dijo...

pues por lo que cuentas no vale mucho...

César Alcapone dijo...

Creo que ha tenido buenas críticas y nominaciones a algún premio Eisner, pero mi plim!
Ya te lo dejaré y podrás comprobarlo.